Revestimientos exteriores de madera
Revestimientos exteriores de madera
Revestimientos exteriores de madera
DEFINICIÓN
Sistema de tablas de madera con los que se revisten paredes exteriores o fachadas, en la norma se denominan “entablados”, en inglés “cladding” y en francés “bardage”.
Los revestimientos realizarse con placas o elementos superficiales (tableros contrachapados, madera-cemento y compactos) y de tejuelas, que no han incluido en este capítulo ya que presentan algunas diferencias.
APLICACIONES
Se utilizan principalmente para recubrir fachadas exteriores verticales y secundariamente aleros y voladizos.
En ningún caso participa de funciones estructurales como arriostramiento o transmisión de cargas. Tampoco tiene como función, salvo mención expresa, proteger el muro frente a la intemperie.
COMPONENTES
El revestimiento de madera se emplea en conjunción con otros elementos del muro formando una serie de capas. En la fachada podemos mencionar las siguientes:
– Estructura portante principal o soporte
El muro o estructura del edificio (muro de fábrica o de otro tipo o un entramado ligero de madera) donde se fija el revestimiento.
– Estructura portante secundaria
Es la estructura intermedia que fija el revestimiento al soporte. Puede ser de rastreles directos de madera o metal o de rastreles sobreelevados.
– Estructura entramado ligero
Una tercera opción es que no exista esta estructura secundaria y se coloca directamente sobre la estructura de entramado ligero.
– Lamas de madera
Son propiamente el revestimiento en formato de tablas de madera o productos derivados.
– Fijaciones
Son los elementos metálicos que fijan el revestimiento a la estructura secundaria y ésta a la estructura portante principal.
– Cámara de aire (optativa aunque recomendable)
– Barrera contra la penetración del agua*
– Barrera de vapor
– Piezas especiales
Piezas de madera maciza, tablero o chapa metálica o plástico que se utilizan para resolver encuentros especiales como esquinas, entrantes y salientes, huecos, petos, etc.
TIPOLOGÍA
El tipo principal es la lama y secundariamente la pieza de celosía. La lama es la pieza de madera natural o mejorada, estrecha y alargada, de ancho moderado (entre 7 y 25 cm); mientras el taco es la pieza de madera maciza de sección sensiblemente cuadrada, biseladas en sus cantos que sirve para formar celosías.
Las lamas de los revestimientos exteriores de madera se pueden clasificar según los diferentes parámetros o propiedades que se exponen a continuación.
Según el material de composición
Son de madera en diversos formatos: madera maciza, madera laminada encolada, madera-plástico y tejuela de madera.
Según su durabilidad
La madera puede tener una durabilidad natural suficiente o mejorada artificialmente con las siguientes posibilidades: madera de durabilidad natural adecuada, madera tratada en autoclave, madera termotratada y madera acetilada.
Según el relieve de la cara
Para poder adaptarse a diferentes funciones decorativas las caras pueden recibir distintos acabados superficiales: serrada en bruto, serrado fino, cepillada, de veta resaltada y rústico o a la azuela.
Según el relieve de la contracara
Pueden ser: lisas o ranuradas.
Según el perfil de la cara
Dependiendo de su orientación (vertical, horizontal o inclinada) la cara puede ser recta (perpendicular o inclinada) o en relieve (con curvas o moldurados) dando lugar a variados diseños en los que cada fabricante se distingue de los demás.
Según el acabado de su superficie (UNE-EN 14519)
Pueden ser satinadas o decapadas. Pintadas, lacadas, aceitadas o en crudo (sin acabado).
Según el mecanizado de sus cantos
– A media madera o solapadas.
– Machihembrados.
ESPECIES DE MADERA
La elección se realiza por diferentes aspectos. Las especies de madera más utilizadas al exterior en España son las siguientes:
– Especies que no requieren tratamiento protector:
Alerce (Larix decidua), Castaño (Castanea sativa Mill), Cedro rojo del Pacífico (western red cedar) (Thuja picata D. Don), Cedro rojo del Atlántico (eastern white cedar) (Thuja occidentalis L.), Cedro rojo del Este (eastern red cedar) (Juniperus virginiana L.), Cumarú (Dipterix odorata), Doussie (Afzelia africana), Elondo (Erythrophleum ivorense), Sucupira (Diplotropis purpurea), Teka (Tectona grandis), Wengue (Milletia laurentii), etc.
Las piezas que se colocan al exterior deben ser de madera de duramen quedando desechada la albura, a no ser que ésta esté tratada en profundidad.
– Especies que se pueden utilizar al exterior con un tratamiento protector:
Abeto (Picea abies), Pino amarillo del Sur (varias especies), Pino insigne (Pinus radiata), Pino Oregón (Pseudotsuga menziessi Franco), Pino pinaster (Pinus pinaster), Pino silvestre (Pinus sylvestris L.)
DIMENSIONES
Dimensiones de las lamas de madera maciza
La normativa europea establece las siguientes dimensiones mínimas nominales que son magnitudes muy bajas para lo que es habitual en el mercado: longitud $750 mm, anchura $40 mm, y grosor $8 mm.
En la práctica los gruesos mínimos que se emplean tanto en tablas tratadas o acabadas superficialmente son de 20-22 mm, porque se considera que aumentar el grosor es quedar del lado de la seguridad al utilizar la madera extra con carácter sacrificial. Las únicas excepciones a esta regla son el cedro rojo y el alerce, que bajan de 15 mm porque son especies ligeras y más estables.
Dimensiones de las lamas de madera laminada
En madera laminada los anchos de las lamas pueden ser superiores a los de madera maciza debido a que el elemento es más estable.
Dimensiones de las lamas de madera termotratada y madera-plástico
Son ligeramente más largas y anchas que las de madera maciza debido a su mayor estabilidad dimensional que disminuye su tendencia al atejado.
Dimensiones de los rastreles
Existen varias gamas dimensionales. Una regla práctica muy extendida recomienda que el grueso mínimo del rastrel sea el del revestimiento y su ancho al menos 2 veces ese valor.
PROPIEDADES DE LAS LAMAS
Calidad estética
La normativa europea prescribe las clases estéticas para determinadas especies de maderas, pero no todas (especialmente las tropicales) han entrado en las normas pese a que están muy introducidas en el mercado español. Para prescribir estas especies se puede acudir a bibliografía especializada.
– Maderas de Frondosas (UNE-EN 14951).
– Maderas de Coníferas (UNE-EN 14519).
– Resto de maderas (clase libre de acuerdo con UNE-EN 14951).
Estabilidad dimensional
Las lamas, debido a que son piezas muy largas, delgadas y estrechas pueden deformarse y provocar que se abran las juntas de solape o de testa posibilitando la entrada de agua. Estas deformaciones también pueden provocar que las lamas se suelten, sobre todo cuando se fijan con clavos. Para evitarlo se recomienda utilizar especies estables (poco nerviosas) y con un contenido de humedad que sea el adecuado a su uso final, así como colocar un número de fijaciones adecuado.
Contenido de humedad
El contenido de humedad para las frondosas en el momento de suministro es de 15 ± 3% (UNE-EN 14951) mientras que para las coníferas es de 17 ± 2% (UNE-EN 14519).
Como complemento a las especificaciones del contenido de humedad que recoge la normativa europea se aconsejan para el caso de España:
– Zonas del interior peninsular: entre el 11 y el 13 %.
– Cornisa Cantábrica, litoral Mediterráneo y zonas insulares: entre el 14 % y el 20 %.
Durabilidad, protección y acabado
En la durabilidad de la madera, que puede ser natural (gracias a la presencia de determinadas sustancias como exudados, taninos, oleorresinas, etc.) o inducida (por sistemas químicos o físicos), también hay que tener en cuenta la presencia de albura y duramen.
La clase de uso que le corresponde, de acuerdo con la norma UNE-EN 335-3, es la clase 3.1 (ocasionalmente húmedo) y en algunas ocasiones puntuales la clase 3.2 (frecuentemente húmedo), que se puede rebajar a la clase 2 e incluso a la 1, si se utilizan maderas con una buena durabilidad natural.
La protección se puede realizar por
– tratamiento en autoclave
La clase de uso 3.1 exige una penetración del producto protector NP2 y la clase 3.2 una NP3).
– tratamiento que modifican la madera (madera termotratada, madera acetilada, madera furfurilada)
El tratamiento debe certificar, mediante los consiguientes informes de eficacia, que la madera modificada es apta, según corresponda, para la CU 3.1 o 3,2.
Los revestimientos de especies de madera con buena durabilidad natural, al igual que los tratados por autoclave vació – presión, requieren aplicar una protección superficial decorativa.
Reacción al fuego
La reacción al fuego de la madera es muy baja, D-s2, d0. Los fabricantes se podrán acoger a esta clasificación sin tener que realizar ensayos. El resto de productos deben ensayarse y clasificarse según la Norma UNE-EN 13501-1.
Permeabilidad al vapor de agua
La resistencia al paso del vapor de agua depende de la especie utilizada, y concretamente de su densidad (a mayor densidad mayor resistencia), debido a la menor presencia de poros y a la mayor presencia de sustancias de impregnación que hacen de barrera al vapor. Se pueden tomar los valores normalizados (UNE-EN 12524) o ensayarse el producto como parte del sistema de muro de acuerdo con la Norma UNE-EN ISO 12572.
Absorción acústica
En una fachada es más importante el aislamiento acústico que la absorción. El del revestimiento exterior de madera es bajo y sólo puede mejorarse si la madera utilizada es más densa y pesada pero ésta es despreciable frente a la que logra el aislante. Como sistema, el muro de fachada funciona como un sistema masa-muelle-masa (donde el muelle lo forma es aislante térmico y la masa, el revestimiento y el muro).
Conductividad térmica
Se puede determinar mediante ensayo de acuerdo con la norma UNE-EN 12664 o utilizar los valores normalizados (UNE-EN 12524).
MARCADO CE
El Marcado CE para revestimientos de madera de exterior entró en vigor de forma obligatoria el 1 de junio de 2008. El marcado CE afecta a los productos terminados, pero no concierne a la instalación.
Los sistemas de evaluación de la conformidad que se exigen son:
1 para usos sujetos a reglamentación de fuego
3 para usos sujetos a reglamentación de sustancias peligrosas
4 para usos diferentes de los indicados anteriormente
MÁS INFORMACIÓN
Publicaciones de AITIM – www.aitim.es
Guía de la madera (tomo I). VVAA. 2010
Fachadas de madera. Editado por AEIM y redactado por AITIM. 2018
Monográficos Revista AITIM
Fachadas de madera Revista nº 325 monográfico. VVAA. 2020
Pliego condiciones – www.aitim.es
